PLASMAGE.

El tratamiento con plasma usa el cuarto estado de la materia: plasma. Los tejidos tratados se ‘subliman’ y evitamos la propagación de calor no deseado a las áreas circundantes.
«El principio del plasma Fibroblast es ionizar gases en el aire para crear un arco eléctrico diminuto, con el cual las áreas dérmicas y epidérmicas que se ven afectadas por problemas estéticos pueden tratarse sin propagar el calor no deseado a las áreas circundantes», detalla Sorela Caro.
Cuando el arco eléctrico (plasma) toca la superficie de la piel, el calor generado se transfiere a la epidermis hasta llegar a la capa papilar que contiene las células de fibroblastos. El resultado es la contracción y el endurecimiento de las células de la piel. En consecuencia, el exceso de piel se reduce y el resultado es comparable a la reducción o levantamiento de arrugas.