CARCINOMA ESPINOCELULAR Y MELANOMA.
Minutos aproximados
Las células escamosas (queratinocitos) son las principales células estructurales de la epidermis (la capa externa de la piel). El carcinoma de células escamosas es un cáncer de estas células. En Estados Unidos, más de un millón de personas son diagnosticadas anualmente de carcinoma de células escamosas y 2500 mueren a causa de este tipo de cáncer.
El carcinoma de células escamosas, el segundo tipo de cáncer de piel más frecuente después del carcinoma de células basales, generalmente se desarrolla en áreas expuestas al sol, pero puede crecer en cualquier parte de la piel o en la boca, donde la exposición al sol es mínima. Sin embargo, las personas cuya piel ha sufrido mayor exposición solar corren un riesgo más alto de desarrollar cáncer de piel de células escamosas. Las personas de piel clara son mucho más susceptibles al carcinoma de células escamosas que las personas de piel más oscura.
El carcinoma de células escamosas puede desarrollarse en la piel normal, pero es más probable que se desarrolle en la piel dañada. Tal daño incluye en ocasiones, radioterapia.
Los cánceres recurrentes o con tratamiento incompleto, los cánceres extensos, los que se localizan en sitios de recurrencia (p. ej., cabeza y cuello) y aquellos similares a la morfea con bordes mal definidos suelen tratarse con cirugía de Mohs bajo guía microscópica, en la cual se estudian los bordes de los tejidos en forma progresiva hasta que estén libres de tumor (lo que se determina mediante la evaluación microscópica durante la cirugía).
Si los pacientes tienen enfermedad metastásica o localmente avanzada y no son candidatos para la cirugía o la radioterapia (p. ej., porque las lesiones son grandes, recurrentes o metastásicas), se puede administrar vismodegib y sonidegib. Ambos medicamentos inhiben la vía hedgehog (una vía que afecta la respuesta a la radioterapia y a la quimioterapia en algunos tumores y está mutada en la mayoría de los pacientes con carcinoma basocelular).
Dermatóloga